El plan de tu vida está en tu nombre

En 𝘌𝘭 𝘊𝘦𝘮𝘦𝘯𝘵𝘦𝘳𝘪𝘰 𝘗𝘦𝘭𝘪𝘨𝘳𝘰𝘴𝘰, novela artúrica anónima del siglo XIII, Gauwain pasa un tiempo presentándose como "El Caballero sin nombre", y sólo lo recupera tras una sucesión de acontecimientos que muestran quién es él realmente. Estudié esta novela cuando estaba en uno de los cursos de Literaturas Románicas que hice en la Universitat de Barcelona. Escribí un trabajo sobre el valor simbólico y la carga energética del nombre como uno de los elementos que contenían y sostenián la identidad real del caballero en el mundo artúrico.⁣

Mi alma me estaba guiando, dándome pistas, llevándome a vivir experiencias interiores intensísimas que, treinta años más tarde, revelarían su sentido, su para qué.⁣

En 𝘌𝘭 𝘊𝘶𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘥𝘦𝘭 𝘎𝘳𝘪𝘢𝘭, de Chrétien de Troyes, Perceval sólo es capaz de descubrir por sí mismo su nombre cuando se lo pregunta el Rey Pescador, en el momento mismo en el que el aprendizaje de Perceval como caballero ha terminado, y sólo le resta adquirir plena consciencia de su identidad.

En 𝘜𝘯 𝘔𝘢𝘨𝘰 𝘥𝘦 𝘛𝘦𝘳𝘳𝘢𝘮𝘢𝘳, la primera de las novelas de la serie Los Libros de Terramar, de Ursula K. Le Guien, el Maestro de Nombres, Kurremkarmerruk, explica a sus discícpulos que "la magia consiste en conocer el nombre verdadero de cada cosa." Así se explica el hecho de que "nadie conocel el verdadero nobre de alguien excepto él mismo y quien le dio ese nombre", porque " el que conoce el nombre de una criatura tiene en sus manos la vida de esa criatura."

Y podríamos añadir que eso es así porque la vida de esa criatura, en este caso un ser humano, está en su nombre, de la misma forma que tu vida está en el tuyo.

Efectivamente, tu Plan de Alma, tu Mapa Álmico para esta encarnación, está en tu nombre, y contiene tres bloques claves de información sobre ti:

1. Los desafíos que tu alma decidió que afrontaras para tu evolución.

2. Los dones y talentos que se despliegan en ti a medida que afrontas dichos desafíos.

3. Los objetivos personales y álmicos para esta encarnación.


Toda esta información, estructurada en varias capas de contenido y significado, está recogida en tu Contrato de Alma, el cual está codificado en tu nombre completo, tal como quedó fijado por escrito en tu certificado de nacimiento. El proceso de descodificación del Contrato de Alma de una persona pasa por el estudio de la equivalencia de los sonidos de ese nombre con los sonidos del hebreo y, después, con el sistema numerológico correspondiente. La configuración numerológica resultante es la configuración energética que contiene y despliega los contenidos del Contrato de Alma.


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